Abog. Francisco Valle Gómez
Conceder mayor cantidad de créditos a los socios, cumpliendo metas preestablecidas, es una práctica estratégica y común hoy en día en las Cooperativas. Sin embargo, no siempre la colocación es tan importante como la recuperación conforme a las condiciones pactadas.Los préstamos deben ser concedidos única y exclusivamente atendiendo las reales posibilidades de los asociados de honrar el compromiso asumido en las condiciones originalmente pactadas. Se debe evitar en lo posible el sobreendeudamiento del socio, ya que ello es el origen y motivo del 90% de los casos de préstamos morosos. La competencia de bancos, financieras, casas de créditos y otros hace que las cooperativas puedan verse constreñidas a reducir los requisitos para poder colocar más préstamos y generar así mas ingresos. En el caso de las cooperativas, no siempre es bueno reducir los requisitos o disminuir el adecuado análisis del riesgo, ya que la consecuencia directa podría ser el aumento directo de la cartera morosa, que conforme las regulaciones del Incoop no debe sobrepasar el 8% de la cartera. Lo que se puede hacer es reducir al mínimo los tiempos dentro de los procedimientos, pero apuntando siempre a no debilitar el análisis de riesgo necesario.
Es mejor colocar pocos buenos créditos que muchos créditos mal concedidos. El Manual de Créditos, los procedimientos y requisitos para la concesión, el análisis de riesgos están para ser cumplidos porque tienen un objetivo único y específico que es la adecuada colocación del dinero de los socios entre ellos mismos, siempre y cuando estén reunidas las condiciones. En muchos casos, la recuperación extrajudicial y/o judicial del crédito no depende directamentedel personal asignado al departamento de recuperación de créditos o al equipo jurídico encargado de las acciones judiciales, sino depende de que tan malo fue el análisis del riesgo y de la verdadera capacidad del pago del socio. Si estos controles previos fueron malos, generalmente todos los esfuerzos por recupera el dinero terminan con una inhibición general de gravar y vender pero sin recuperación efectiva del dinero. Otro factor importante para mantener una cartera sana es crear conciencia mediante la educación financiera de los asociados, al efecto de que los mismos puedan efectivamente satisfacer sus necesidades de crédito, pero en la justa medida y solo cuando sea necesario. Es importante también motivar la práctica del ahorro entre los socios y así promocionar el mejoramiento de la calidad de vida de los mismos y sus familias. Practiquemos la solidaridad y la ayuda mutua, pero sin comprometer la estabilidad de la cooperativa, mediante la educación financiera y el cumplimiento estricto de todas las normas establecidas para el otorgamiento de los créditos.