Ayer se realizó el segundo lunes de la huelga de pasajeros, que la semana pasada convocaron los integrantes de la Asociación de Usuarios y Consumidores del Paraguay (Asucop), en rechazo a lo que denominan “la mafia del transporte público”.
Esta vez, se instó a los pasajeros a que devolvieran el boleto a los choferes para que los mismos puedan quedarse con el dinero, golpeando de algún modo el bolsillo de los empresarios. Según informes, con esta medida el lunes pasado se anularon más de 100.000 boletos que en guaraníes se traduce en 240 millones.
Entre los puntos exigidos, destaca el repudio hacia el Centro de Empresarios del Transporte del Área Metropolitana (Cetrapam) y el Viceministerio de Transporte que desde hace un tiempo vienen realizando reguladas y amenazas de paros. Por este motivo, se exige una serie de medidas como la renuncia del viceministro de Transporte, Agustín Encina; un plan regulador del transporte metropolitano que realice un estricto control en la flota, itinerarios y costo del pasaje, así mismo se rechaza el subsidio por los 100 guaraníes y la donación de los 30.000 dólares para las nuevas unidades.
