La primera visita odontológica debe ser agradable, positiva y simple, ya que el futuro comportamiento del niño dependerá en gran parte de ella.
Es necesario realizar cosas sencillas e ir avanzando a las más complejas, a menos que sean necesarios tratamientos de urgencia.
Se realizarán procedimientos simples como: examen clínico, toma de radiografías, profilaxis, fluoruros, etc. Todas estas constituyen formas de adaptación del niño al tratamiento dental.
Para lograr el tratamiento dental del niño en la consulta odontológica, debe comprenderse su conducta, por ello, es importante conocer las etapas de crecimiento de estos y la actitud que los padres tienen para con sus hijos. La conducta variará de acuerdo a la edad que tenga el niño.
Dos años: Dependencia de la madre. Se necesita tiempo para habituarse a situaciones nuevas. Cambios rápidos de humor. Cansancio fácil.
Tres años: Mayor contacto verbal. Deseo de imitación.
Cuatro años: Gran actividad física y mental. Inquisitivo, gran hablador, desea probar nuevas experiencias. Confianza en sí mismo.
Cinco años: Estabilidad emocional. Deseo de ser aceptado; sensible a las alabanzas y recriminaciones.
Seis años: Alternancia entre el afecto y el rechazo. Tendencia a la hipocondría. Poco interés por el orden y la limpieza. Debe explicársele al niño lo que se le hará, después se le enseña el instrumental y luego se simula.