domingo, septiembre 24, 2023
spot_img

Escenarios auspiciosos marcan el inicio de un repunte en el sector

Según el Banco Mundial, las estables bases macroeconómicas más un sistema financiero sólido, permiten a Paraguay recorrer el camino hacia el crecimiento económico.

Estos indicadores representan un respiro para el movimiento cooperativo, dado que en los últimos dos años se enfocaron netamente en sostener la estabilidad financiera de los socios a través de diversas ayudas tanto económicas como sociales. Este año, se estima que se seguirá utilizando esa línea de trabajo, pero con la diferencia de que ahora se buscará recuperar lo otorgado en tiempos de pandemia y así volver a alcanzar los indicadores financieros sólidos de cada institución.

 Para lograr esa premisa, más que nunca la planificación estratégica deberá ser el caballito de batalla para las cooperativas en los próximos 3 años.

Conocer la opinión de los socios, entender el contexto actual a nivel nacional e internacional pospandemia, analizar las fortalezas y debilidades institucionales y comprender que la digitalización llegó para quedarse son algunos de los focos donde más atención se debe prestar con el objetivo de ejecutar planes de trabajos que puedan ser bajados y aplicados a la realidad de cada socio y sus familias.

Las cooperativas que desarrollan una inteligencia organizacional, que utilizan las nuevas tecnologías y las que acompañan los grandes cambios serán las que más rápido se recuperen. En cambio, las que solo se centran a trabajar como antes del 2019 y en no querer entender la evolución de la sociedad y los nuevos estilos de vida, solo hallarán estancamiento en los procesos de salir adelante a corto, mediano o largo plazo.

Morosidad

 Para que las cooperativas logren alcanzar los indicadores verdes en sus porcentajes de morosidad, se debe entender que la capacidad de pago del socio dependerá de la recuperación de su bolsillo para devolver lo prestado. Así mismo, y dentro de ese contexto, las entidades deben manejar con inteligencia la morosidad. Se debe seguir detrás de los socios con nuevas propuestas que les permitan honrar sus deudas sin desfallecer en el intento.

Fortalecimiento en los ejes de créditos, educación y asistencia

Desde septiembre del año pasado, Cooperativa Reducto está enseñando a sus socios a formar su propio capital a través del ahorro y la educación financiera. Consideran que luego de la pandemia se desnudó una agravante realidad que evidenció la falta de interés en guardar dinero en casos de emergencia. Tras eso, la cooperativa trabajó lado a lado con el socio arrojando buenos resultados. Parte de su planificación es la fuerte apuesta a la formación de asesores de créditos considerando que al ser personas capacitadas por la entidad adquieren mayor sentido de pertenencia y comprenden mejor los procesos internos de cada área.

Además, apuntan a tener una cartera más rentable en el sentido que las personas acostumbran a pedir créditos a largo plazo por el alto endeudamiento. Esta situación no es buena para nadie, por eso plantean reeducar al socio en contraer compromisos a corto plazo. Sin dejar de lado la asistencia, el área social también estará dentro de la agenda de trabajo; conectar con vecinos de la zona, conocer sus preocupaciones e invitarles a conocer las bondades de una cooperativa serán algunos de los lineamientos como así también reforzar las alianzas con grandes empresas en beneficio del socio en cuanto a salud, educación, recreación, comercio, productos y servicios.

Artículos relacionados

- Advertisement -spot_img

ÚLTIMAS NOTICIAS